¿Para qué sirve el número de registro sanitario?

Muchas personas se preguntan si realmente el número de registro sanitario es importante para las empresas del sector y la realidad es que si eres el dueño de una de ellas este artículo te interesa.

Son muchos los conocimientos que deben de adquirir las empresas para poder estar al día con los requisitos establecidos por las autoridades. Por ello, desde Índico, proporcionamos a nuestros clientes todos los conocimientos necesarios para que puedan estar al día con las autoridades de la manera más simple y eficiente posible. Esto se consigue gracias a la experiencia adquirida gracias a años dentro de este mercado.

Pero…¿Qué es el número de registro sanitario?

El registro sanitario, conocido también como Registro General Sanitario de Empresas Alimentarias y Alimentos (RGSEAA), se encuentra regulado por el Real Decreto 191/2011, de 18 de febrero. El objetivo que persigue es el de proteger a los consumidores de cualquier tipo de problema que pueda ocasionar a los consumidores, así como de proteger los intereses que estos persigan.

Además de ello, el registro sanitario permite tener un control exacto sobre las empresas que realmente están inscritas en este registro de forma oficial y que por consiguiente, acatan las normas establecidas por las autoridades.

El registro sanitario tiene carácter nacional, pues su implantación es por toda España, y se lleva a cabo de manera pública. De esta forma, no solo las empresas pueden consultarlo, cualquier persona que tenga curiosidad y quiera conocer cualquier dato, puede hacerlo sin ningún tipo de problema.

¿Quién debe inscribirse en el Registro Sanitario?

La obligación de inscribirse en el Registro Sanitario recae de forma directa sobre todas las empresas alimentarias o que trabajen con productos que puedan influenciar en la salud de las personas que los lleguen a consumir. Pero no solo esto, para poder inscribirte en el registro sanitario es necesario que se cumplan todos y cada uno de los siguientes requisitos:
● En el caso de que se trate de una empresa cuya actividad se lleve a cabo de manera física, es imprescindible que el establecimiento donde se realizan todas operaciones se encuentre dentro del territorio español. De la misma forma sucede cuando nos referimos a empresas que trabajan únicamente de forma online. Estas deben de tener su sede o domicilio social dentro del territorio nacional.
● Que la actividad de la empresa sea alguna de las siguientes:
1. Alimentos que estén destinados al consumo humano o cualquier producto complementario de estos que pueda tener consecuencias similares a las del propio alimento.
2. Materiales y objetos que en algún momento u otro estarán en contacto con los alimentos que posteriormente serán consumidos.
3. Coadyuvantes tecnológicos utilizados entre otros para la elaboración de los alimentos.
● Que se encargue entre otras de:
1. La producción, transformación, elaboración y/o envasado de los productos.
2. El proceso de almacenamiento, distribución o de transporte de los productos.
3. Que se dediquen a la importación de productos de otros países no pertenecientes a la Unión Europea.

En el caso exclusivo de que la empresa se dedique a la manipulación, transformación, envasado o almacenamiento de productos de cara al consumidor final, no tiene la obligación como tal de inscribirse en el Registro Sanitario. Por el contrario, sí que es necesario que los comercios minoristas estén controlados por medio de los registros de cada Comunidad Autónoma.

¿Qué sucede cuando nos inscribimos en el Registro?

Tras el proceso de inscripción en el registro, las consecuencias que puede suponer disponer de un número de registro son exclusivamente cuestiones de identificación administrativa y a su vez efectos censales.

De esta manera lo que se consigue es la comunicación por parte del interesado de la existencia de su empresa, así como fijar una localización para esta y un resumen con las actividades que va a llevar a cabo de tal manera que la autoridad competente pueda tener un conocimiento sobre ello.

Tan solo si observamos el artículo 4.2 del Reglamento (CE) nº 853/2004 del Parlamento Europeo y del Consejo, de 29 de abril de 2004, a través del cual se establecen normas específicas de higiene de los alimentos de origen animal. De esta manera, el número de registro obtiene un valor añadido ya que concede la previa autorización por parte de las autoridades de cada comunidad autónoma, de que se lleven a cabo las prácticas necesarias para la actividad en las instalaciones de estos.

Como consecuencia, será necesario inscribir el número de registro en todas y cada una de las etiquetas de los productos, así como en la documentación que acompaña a los productos.

¿Qué significa el número de registro sanitario?

La función que desempeña el número de registro es básicamente la de poder identificar de forma administrativa a una empresa. Es decir, mediante su utilización, las autoridades e incluso el resto de empresas pueden tener un control sobre el tipo de actividades, o la localización que tenga la empresa. Por otro lado, no resulta obligatorio para las empresas utilizar dicho número en la elaboración de la etiqueta de los productos.

Tras realizar todos los trámites necesarios impuestos por las autoridades, la empresa interesada obtendrá un número a través del cual se podrá llevar a cabo dicho proceso de identificación por parte de la Administración y el resto de empresas.

De la misma manera, hay que tener en cuenta que dicho número, suele ir precedido con las iniciales de la Comunidad Autónoma donde la empresa tiene su sede. A partir de aquí, el número que aparece es la clave del sector que dependerá, del tipo de producción del que se trate. Es decir, en función de los procesos que se puedan llevar a cabo por la empresa se obtendrá un número de registro sanitario u otro.

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