A día de hoy podemos encontrar una alta variedad de artículos sanitarios en el mercado. Tal es el punto que incluso se pueden encontrar muchos que únicamente estaban destinados para uso personal en el pasado. Sin embargo, en la actualidad hay mucha gente que los utiliza para su uso personal, como por ejemplo los tensiómetros.
Sin duda, para muchos esto puede considerarse como un gran avance. Hay mucha gente que gracias a esta clase de instrumentos ha podido descubrir una patología que en caso de no haberla pillado a tiempo podría haber significado un problema realmente grave.
En el caso de que quieras conocer un poco más el mundo de los productos sanitarios, ¡no te vayas porque empezamos!
¿Qué son los artículos sanitarios?
Como te puedes imaginar, podemos encontrar una gran variedad de artículos sanitarios pues este grupo engloba todos los dispositivos, productos o aparatos que puedes encontrar en cualquier centro médico. `Por si fuera poco, también podemos encontrar productos de carácter informático, lo que hace que la lista aumente más si cabe.
Atendiendo a la definición, conocemos a los artículos sanitarios como los dispositivos o instrumentos que son utilizados por los profesionales sanitarios a la hora de diagnosticar o de curar a un paciente.
Realmente se trata de un producto bastante importante dentro de este sector. Tengamos en cuenta la multitud de actividades que tiene que realizar un médico a lo largo de un día. Si no contase con la ayuda de esta clase de aparatos sería demasiado complicado mantener un ritmo de atención adecuado.
¿Cómo afecta la legislación a esta clase de productos?
Como te puedes imaginar, esta clase de productos deben ser regulados de forma diferente. Es más, lo más probable es que la regulación que se realice en el país en el que te encuentres, sea diferente a la de otro. En el caso concreto de España, todo lo que necesitas saber sobre las normas que regulan estos productos se encuentra en:
- Ley 14/1986 General de Sanidad
- Ley 25/1990 del medicamento
Obviamente no solo tenemos que fijarnos en el contenido de estas leyes. Con el paso del tiempo las autoridades han ido incrementando el número de normas que regulan este campo.
Artículos frontera
En artículos anteriores hemos podido observar la clasificación clásica de productos sanitarios. Es decir, hemos podido ver como se clasificaban en productos clase I, IIa, IIb y III.
Sin embargo, también podemos ver otra clase de productos que son clasificados en función de lo artificial que sean. Es decir, tras un estudio previo de la composición, la estructura que tienen o el uso que se les puede llegar a dar, se clasifican.
Por ejemplo, vamos a poner el ejemplo de una jeringuilla. El uso que se le puede dar no es otro que el introducir una sustancia a través de un orificio. Por tanto la clasificación que se realiza es la siguiente:
- Grupo: instrumento que sirve para introducir un fluido.
- Subgrupo: jeringuilla
- Clase: convencional
- Genérico: central
Por tanto, a partir de esta clasificación podemos incluir dentro de este grupo a todos los instrumentos que cumplan con las mismas características.
Conclusiones
Para poder estar al día con todas estas clasificaciones y con los problemas que pueden llegar a aparecer, es necesario contar con amplios conocimientos sobre el tema. Desde Índico somos conscientes de ello y es por eso que contamos con los mejores profesionales. No solo en cuanto a conocimientos se refiere, sino que también damos mucha importancia a la experiencia.
Gracias a ello, podemos ofrecer a nuestros clientes los mejores servicios posibles para que puedan comenzar su actividad empresarial sin tener problemas con ninguno de los artículos sanitarios que vendan.